Soro y Mayte Andreu han dado a conocer los datos de solicitudes presentadas a las convocatorias de ayudas financieras al alquiler y ayudas a la rehabilitación 2017. Este año el total de las ayudas alcanzan el importe de más de 17 millones de euros. Soro ha destacado como una prioridad del Departamento el mantenimiento de un importante compromiso social con las aragonesas y los aragoneses que, en el caso de las ayudas al alquiler, puede suponer que las personas que las reciban puedan conservar su vivienda en un momento dado de dificultad. También ha señalado el compromiso del Departamento con la mejora de la calidad de vida en las viviendas a través de la rehabilitación, lo que a su vez puede suponer una aportación a la creación de nuevos puestos de trabajo. 

La buena gestión en la tramitación de las solicitudes es básica para ayudar a las personas a conservar su vivienda de alquiler y para mejorar la calidad de vida en cuestiones tan importantes como la accesibilidad o la eficiencia energética. Un ejemplo de esta prioridad social y de este compromiso, es el aumento progresivo de las ayudas destinadas, muy significativo tomando como referencia los datos de 2013 y 2014.

El total de las ayudas alcanzan el importe de más de 17 millones de euros. A las ayudas financieras al alquiler se destina un total de 7 millones de euros y a las ayudas a rehabilitación un total de 10.121.052 euros. La dotación de las ayudas financieras al alquiler han aumentado en 1.6 millones respecto a 2016 y más de 2,2 millones respecto a 2015.

Soro ha destacado la importante labor previa en materia de información, atención a la ciudadanía y gestión para poder cumplir los plazos de la convocatoria.

En el caso de las ayudas a financieras al alquiler, se ha registrado un total de 9.138 solicitudes, casi un 20% más que en la convocatoria anterior en la que se registraron 7.652. La directora general de Vivienda y Rehabilitación, Mayte Andreu, ha señalado que se observa un incremento de las ayudas solicitadas por población joven o muy joven lo cual quiere decir que estamos normalizando estas ayudas más allá de la exclusión social, un sector al que se destinan otro tipo de ayudas diferentes. Uno de los aumentos más significativos se refiere a la población entre 20 y 29 años, ejemplo de que se trata de unas ayudas que sirven también para la emancipación. Respecto al número de miembros de cada unidad de convivencia, se observa un aumento muy importante de solicitantes que viven solos en su vivienda.

Mayte Andreu considera que estas ayudas son de carácter preventivo, un apoyo en un momento puntual que puede servir para conservar la vivienda de alquiler, que es muy diferente a las personas que precisan una vivienda social o que sufren un desahucio. Entre los requisitos que deben cumplirse para acceder a las mismas se incluye estar al corriente de pagos de las mensualidades del alquiler, que el precio del alquiler no supere los 600 euros o que la renta se sitúe entre el 0.5 y el 3 del IPREM (excepto para el caso de mujeres víctimas de violencia machista).

También muy significativo ha sido el aumento de las solicitudes para ayudas a la rehabilitación. El presupuesto de la convocatoria es de 10.121.052 €. El pasado 14 de agosto concluyó el plazo de presentación de solicitudes de la convocatoria de rehabilitación, y se han presentado un total de 742 solicitudes, lo que supone el 75,41 % más que en la anterior convocatoria 2015-2016, que se desarrolló durante dos años y a la que se presentaron 423 solicitudes.

En una primera estimación se puede estimar que el 32 % de las actuaciones serán de conservación, el 8 % de sostenibilidad y el 60 % de accesibilidad.

En estos momentos se está en el proceso de elaboración del Plan Estatal 2018-2021 del que ya existe un borrador. Soro confía en que este nuevo Plan esté disponible lo antes posible para que se pueda incluir en los próximos presupuestos del Gobierno de Aragón. Además, considera prioritario que recoja cambios sustanciales como, por ejemplo, que a las ayudas a la rehabilitación puedan optar también las viviendas unifamiliares, mayoritarias en los municipios de Aragón.

A lo largo de este mes se procederá a informar sobre los requerimientos de más documentación. Se publicará en el BOA y se avisará a los solicitantes a través del medio de comunicación que hayan elegido en la solicitud: sms, mail o correo ordinario. A partir de ese momento, contarán con 10 días para aportar la documentación necesaria. A finales de octubre se conocerá la resolución de la convocatoria. Mayte Andreu ha señalado que, en el caso de las ayudas a inquilinos, se espera que el primer pago, de enero a junio, se pueda realizar en el último trimestre de este año. (Aragón hoy)