Joaquín Palacín, Secretario Territorial de CHA-Altoaragón, asegura que esta vía, el denominado “Eje Pirenaico”, que enlaza la frontera francesa de Portbou con Sabiñánigo, de manera paralela a la cordillera, conectando tres comarcas altoaragonesas, es un eje prioritario, pero parece que no lo está siendo tanto para los sucesivos responsables del Ministerio de Fomento.  El pasado mes de marzo, el senador de Compromís, Carles Mulet, a iniciativa de CHA, presentó la siguiente pregunta en la Cámara Alta:

“¿Cuál ha sido la cantidad finalmente ejecutada de la partida denominada N-260 Congosto del Ventamillo-Campo contemplada en los Presupuestos Generales del Estado para 2017?, ¿se realizó alguna modificación presupuestaria a lo largo del anterior ejercicio con respecto a la inicialmente aprobada por el Gobierno?”

La respuesta fechada el 24 de abril de 2018 indica:

En relación con el asunto interesado, se señala que la actuación “N-260. Tramo: Congosto del Ventamillo – Campo (18,2 km)” tiene el proyecto aprobado. Se procederá a su licitación cuando las disponibilidades presupuestarias lo permitan”

¿Qué ha ocurrido entonces con los tres millones de euros que contemplaban los Presupuestos Generales del Estado para 2017? ¿los 900.000 euros previstos para este años en los P.G.E. van a ser suficientes, si es que se aprueban finalmente, para empezar las obras?, ¿cuándo tendremos un compromiso con fecha fija de comienzo y finalización y con inversiones concretas para este tramo?

Con estos datos a nadie nos puede extrañar que esta actuación sea una de las treinta que en todo Aragón llevan diez años o más en los Presupuestos Generales del Estado y, en este caso, ni siquiera han comenzado las obras.

Recordamos que la dirección general de Carreteras del Ministerio de Fomento aprobó una resolución fechada el pasado 2 de agosto de 2016, con el proyecto para el acondicionamiento de la carretera nacional N-260, en el tramo del Congosto del Ventamillo y el municipio de Campo y que a fecha de hoy seguimos sin licitación del mismo.