La militancia de CHA reunida en Alcañiz, con motivo de la convocatoria de la Comisión de Coordinación de CHA de las Comarcas del Sur, ha abordado diferentes asuntos de interés político, como analizar la gestión de CHA dentro del Gobierno de Aragón o valorar las inversiones previstas en los Presupuestos Generales del Estado para 2018, con la vista puesta en afrontar ya las elecciones locales y autonómicas del próximo año 2019 y ha propuesto «abrir el debate» sobre la creación de un «Parque Natural” en las sierras orientales de las comarcas de Teruel.
Se ha debatido sobre las perspectivas de futuro del medio rural de las comarcas del sur de Aragón, con cuestiones como las repercusiones de las inversiones previstas del Estado en Aragón, que nuevamente vuelven a ser insuficientes, a juicio de CHA, la instalación de nuevos parques eólicos y fotovoltaicos, con las consiguientes necesidades formativas que habrá que implantar en la zona.
Igualmente se ha planteado la necesidad de ordenar el territorio para dar cabida a esas nuevas instalaciones intentando que las zonas de alto valor ecológico y paisajístico de las comarcas turolenses no se vean afectadas. En este contexto, para que las zonas de alto valor natural no se
sientan relegadas ante las nuevas oportunidades económicas, Chunta Aragonesista propone, como uno de los puntos tratados en esta reunión, abrir el debate de la declaración de un espacio protegido de relevancia en las sierras orientales de Teruel.
Estamos en uno de las pocos lugares en todo el Estado donde no existe un Parque Natural, una figura de protección que conlleva una importante aportación de fondos públicos, por parte de las administraciones públicas implicadas, para permitir desarrollar, con garantías, todo el atractivo del ecoturismo y la conservación y gestión de la naturaleza, así como del paisaje tradicional. Una apuesta decidida, en definitiva por el desarrollo endógeno, basado en los recursos naturales de la zona.
Esta propuesta no es solo una medida más de conservación y protección de la naturaleza, sino una apuesta decidida de la zona por un desarrollo económico especializado y sostenible que permita generar expectativas de futuro y diversificar la economía, apostando especialmente por el turismo, los productos agroalimentarios y el empleo joven.
La declaración de Parque Natural sería toda una apuesta estratégica para una zona donde hay un grave problema de despoblación en los municipios de montaña. La población local no tiene que pensar solo en las posibles limitaciones, que necesariamente tendrán que ser negociadas con ellos, sino también en las oportunidades que puede generar.
El Moncayo o la Sierra de Guara, por ejemplo, reciben importantes inversiones públicas todos los años para la gestión del Parque Natural y tienen una gran atracción de visitantes. Así que las administraciones competentes tienen una gran oportunidad con esta iniciativa para apoyar con hechos y no solo con palabras a una de las zonas más despobladas de las comarcas de Teruel.
Recordemos que los denominados «Mapas del Paisaje», elaborados desde Ordenación del Territorio, dentro del Departamento de Vertebración, así como los espacios declarados como Red Natura 2000, ya definen como zonas de alto valor paisajístico importantes áreas de las comarcas del Matarranya, Bajo Aragón, Maestrazgo y Gúdar-Javalambre, que además conectan con otros espacios ya declarados como Parque Natural en zonas próximas como las comarcas de Tarragona y Castellón, con todo el potencial que ello supone.
Además hay que tener en cuenta que los últimos estudios científicos elaborados respecto al desarrollo económico en zonas de alto valor ecológico, indican que las figuras de protección como los Parques Naturales permiten asentar y mantener población en las zonas afectadas, incluso aumentan el nivel de renta de las mismas.