Tras el anuncio de convocatoria realizado por el Presidente del Gobierno de España, señalando como fecha para la disolución de las Cortes Generales el próximo día 5 de marzo y para la celebración de las elecciones el 28 de abril, el Consello Nazional, tras un profundo debate, el Consello Nazional acuerda tomar en consideración la propuesta realizada por el presidente Soro y trasladarla para su debate y, en su caso, aprobación, a un próximo Comité Nazional Extraordinario, que se fija para el día 23 de febrero.

La inmediatez de la convocatoria no nos deja tiempo que perder y nuestro máximo órgano entre Asambleyas, deberá debatir y, en su caso, decidir, sobre la iniciativa trasladada desde el Consello Nazional: propuesta de creación de una candidatura electoral que aglutine a todos los grupos de la izquierda en Aragón.

Después de analizar la especial situación política por la que estamos atravesando, tanto en Aragón como en el resto del Estado, en la que la unión de las derechas y de la extrema derecha es un hecho, constatado en Andalucía, necesariamente tenemos que ser audaces en las propuestas y adoptar decisiones valientes y generosas desde la izquierda, lo que nos debe hacer reflexionar y, cuando menos en el Senado, cámara territorial en la que se toman decisiones de gran transcendencia (techo de gasto, 155…), tenemos la obligación de procurar que la izquierda pueda tener la mayoría, para así poder frenar las políticas que nos quieren hacer retrotraer a épocas ya olvidadas, al blanco y negro de los estertores del franquismo.

La iniciativa propuesta, de llevarse a término, garantizaría en Aragón ocho de los trece diputados y nueve de los doce senadores en las próximas elecciones y, como ha señalado Soro, hay un precedente histórico que generó una gran ilusión en la sociedad zaragozana de 1977, en la queante una situación excepcional se adoptó una iniciativa excepcional, creando una candidatura de unidad democrática al Senado (CAUD) que arrastró la mayoría de los votos de la ciudadanía, haciéndose con tres senadores en detrimento del partido mayoritario del momento, como era la UCD.  Desafortunadamente, en las circunscripciones de Teruel y Huesca no fue posible el pacto de las fuerzas progresistas y fue la derecha la que sacó la mayoría de senadores.

La propuesta que se traslada es de máximos, por lo que cualquier posibilidad de negociación deberá ser considerada, pero es nuestro Comité Nazional quien tiene la decisión sobre la aprobación de la misma.

Por otra parte, desde el Consello Nazional y ante esta situación sobrevenida, y porque los planos son muy diferentes, entendemos que no podemos permitir que lo estatal condicione nuestra forma de concurrir en Aragón, y menos cuando ya se han celebrado todos los procesos internos de primarias, organización, etc, por lo que se considera que esta propuesta en nada afecta a todo lo actuado y decidido de cara a las elecciones a Cortes de Aragón y municipales, más allá, como es obvio, del importante factor condicionante que va a envolver todo lo que a partir de este momento representa esta convocatoria, trasladando inevitablemente el debate a nivel estatal, en el que un partido como el nuestro pierde claramente visibilidad.

Por lo tanto, debemos ser audaces y seguir manteniéndonos en el centro del debate, como, a pesar de nuestra limitada representatividad, hemos conseguido hacer hasta ahora, tomando entre todas y todos las decisiones más acertadas.